Una concha marina es extremadamente delicada y la forma de pulirla es a menudo un proceso de dos pasos que involucra tanto el esmerilado como el pulido. Debido a la delicada naturaleza de las conchas marinas, no se recomienda el desbaste. Si usted es un coleccionista, este proceso puede reducir el valor de la concha.
A continuación le ofrecemos algunos consejos para pulir una concha de mar.
Paso 1 – Lavar
Lave su concha marina a fondo, asegurándose de alcanzar todas las curvas para que no quede suciedad u olor.
Paso 2 – Remojar
Haga una solución de 1/2 blanqueador y 1/2 de agua en un cubo y remoje su concha de mar en él durante la noche. Retire y enjuague la cáscara a fondo a la mañana siguiente.
Paso 3 – Relimpiar
Utilizando un cepillo suave y un detergente suave, límpiela bien de nuevo, cubriendo todas las curvas y dobleces de la concha. Cuando lo limpie, séquelo bien.
Paso 4 – Aceite y lustre
Con un paño suave, ponle un poco de aceite mineral y frótalo sobre tu concha de mar. Deje que el aceite permanezca en la cáscara durante unas horas. Ahora, limpie el aceite extra de la concha marina y límpiela suavemente hasta que la concha brille.